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sábado, 5 de octubre de 2024

Los jóvenes y la FEU, ¿nos parecemos? (+Video) (+Infografía)

La manera en que la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) se acerca a los jóvenes hoy es una problemática a debate en las distintas universidades...

Laura Alonso Hernández en Exclusivo 23/12/2018
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A pesar del trabajo, muchos estudiantes hoy ya no se identifican con la FEU como la organización que los abraza desde que entran a la universidad.

“No, yo no estoy en nada de eso”, me dice un amigo mío al que le pregunté sobre las actividades en su Facultad. “Al final es una pérdida de tiempo, yo no voy a ser ni bailarín ni deportista cuando me gradúe, eso de la FEU no es para mí”.

Después, los argumentos iban y venían, los “no me siento representado”, el “no tengo tiempo”, el “siempre van los mismos” que fueron desencadenados por una simple pregunta. Al final de la conversación (monólogo) le pregunto “¿Pero, no lo puedes decir en algún lugar?”, a lo que me responde un “no sé”.

Después de ese encuentro me puse a pensar quizás en lo distintas de nuestras historias, pues siempre estuve vinculada en todas las actividades de la organización, incluso en mi 5.o año todavía encuentro un poco de tiempo para dedicárselo, parece que entro en el ámbito de “los mismos”.

Sin embargo, no es la primera vez que tengo esta discusión y creo que tampoco será la última, es que ¿la FEU ya no representa a los jóvenes de ahora?

Tradición, actualidad y noveno Congreso

La Federación Estudiantil Universitaria (FEU) fue fundada por Julio Antonio Mella el 20 de diciembre de 1922 y en este año se acerca a su 96 aniversario. Desde su creación ha sido partícipe de grandes hitos de la historia de nuestro país y ha llevado en alto la representación juvenil a todos los ámbitos.

Desde su propia visión la organización se caracteriza por la participación, la inclusión y el protagonismo de todos sus miembros. Mas, no es un sentimiento que se respire por completo en su estudiantado, y a pesar de poseer un carné que te caracteriza por ser, en algunos casos se queda para pagar a mitad de precio teatros y centros nocturnos.

“Yo creo que la organización necesita seguir repensando su funcionamiento y adaptarse a las nuevas dinámicas de la sociedad contemporánea. No se puede pedir que sea la misma FEU de Mella y José Antonio, esta es diferente, y tiene otra manera de comunicarse con sus miembros”, así comenta a Cubahora, Santiago Jérez Montelier, secretario de Comunicación de la FEU nacional.

“Es una relación que, en principio, aún falta que los estudiantes se identifiquen con la organización, aunque ciertamente en las universidades las FEU tienen un papel protagónico por la gran cantidad de actividades y movimientos. Es una de las pocas organizaciones que tiene espacio para todos, para el artista, el deportista, el que le gusta la ciencia, el docente, tiene espacio para todos los estudiantes”.

Muchos de estos problemas formaron parte de la agenda del 9.o Congreso de la FEU, un proceso que se llevó desde las brigadas hasta el nivel nacional y que involucró a gran parte del estudiantado universitario y ventiló los principales temas que ocupan su agenda.

“A raíz del 9.o Congreso hemos logrado acercar más la masa estudiantil a todos los movimientos en el desarrollo que está alcanzando la organización. Dígase en la propia tarea Educando por Amor, en los Festivales de Cultura y en el auge logrado en los Idearte, realizados mensualmente como proyecto extensionista. Se ha visto más motivación, más participación de los estudiantes”, nos explicó Ailet Borges Serra, presidenta de la FEU de la Universidad de La Habana.

“Un aporte es el cumplimiento de muchos de los planteamientos del 9.o Congreso y la respuesta a las demandas de los estudiantes, como las rendiciones de cuenta y las presentaciones en las brigadas. Esto ha logrado que el estudiante exija por lo que una vez proclamó y se cumpla para que no se quede para el 10.o congreso, cuando hay cosas que se pueden ir solucionando y avanzando durante el curso”.

En ese momento la FEU se enfrentó a la gran problemática de ser la figura que los jóvenes universitarios hoy reclaman, proponer iniciativas con el fin de lograr un mayor acercamiento y buscar soluciones para que sus miembros se sientan más identificados.

“Pienso que el 9.o Congreso logró activar un poco a todo el estudiantado y ponernos en función de la FEU como organización. Yo creo que también hay desconocimiento del propio funcionamiento, no que se desconozca la FEU, sino su labor y sus documentos rectores”.

MOTIVOS QUE NOS DEJAN PENSANDO

A pesar del trabajo realizado, muchos estudiantes hoy ya no se identifican con la FEU como la organización que los abraza desde que entran a la universidad. En momentos como este hay que repensar su funcionamiento y cómo se acerca al resto de sus miembros.

Leslie Abello Viera, presidenta de la FEU de la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana, argumentó: “Realmente existen grandes problemas y los estudiantes no se sienten identificados con la FEU, no hay movilización. Hay que buscar un modo de motivarlos porque si no siempre somos los mismos. No es la mayoría es la minoría, lo cual hace complicado el trabajo de las FEU en la facultad”.

Este problema no se concentra en un centro, está generalizado en la comunidad universitaria en general. “Lo veo desde las deficiencias que plantean los otros presidentes de facultades en los consejos de la FEU. Que si existen problemas en cultura, en deporte, que si siempre somos los mismos; porque somos ese grupito de personas que siempre trabajamos y tratamos de movilizar. Creo que esto es a nivel de Universidad, e incluso de país”, nos dice.

La organización es un tema central en este asunto. La falta de ella genera a veces que las actividades no tengan la repercusión esperada y hacen mella en los estudiantes las movilizaciones de un lugar a otro sin previo aviso.

“Muchas veces los problemas vienen derivados de la falta de información, descoordinación y surgen entonces las dificultades de no saber las actividades, y después hay que buscar en último momento a las personas para llenar espacio, eso afecta al estudiante”, cuenta Leonardo Longo Zamora, estudiante de Derecho de 2.o año de la Universidad de La Habana.

Los Turnos FEU son un método que se emplea en todas las universidades como vía de comunicación directa de los miembros con su secretariado. Es el espacio donde los estudiantes pueden mostrar sus inquietudes y preocupaciones. Sin embargo, no encuentran la segunda parte, donde puedan ver cómo esos problemas se arreglan o si se están tratando.

“Cierto que todos los miembros que ocupan el secretariado son estudiantes y que la gran mayoría tiene intereses parecidos a los de nosotros pero en la práctica dichas preocupaciones no son tenidas en cuenta. Están más presentes los planes y los ideales de la FEU como infraestructura que como verdadera organización. Es usada más bien como un instrumento que como una auténtica unión de los estudiantes para buscar sus fines, propósitos y medios para defenderse” nos habla Gabriel Medina, estudiante de 2.o año de Derecho de la Universidad de La Habana.

La relación de la dirección de la FEU con sus estudiantes a veces resulta insuficiente porque en las múltiples cuestiones que manifiestan no logran tener el impacto que esperan ver.

“Los estudiantes vienen a la escuela solamente a estudiar y si algo a alguna fiesta. Pero, no hay esa comunicación estrecha como para decir “yo soy miembro de la FEU”, al contrario, solamente se sienten parte de Universidad. No sienten que son la organización, para ellos el secretariado de cada una de las facultades es la FEU. Es como si fuera algo aislado al proceso de la vida universitaria de los jóvenes”.

Las razones para esta desmotivación pueden ir desde la propia estructura a un contexto más allá del universitario y que pasa por la situación complicada para el país.

Al respecto, Ailet Borges opina: “En estos momentos no existe la apatía hacia un movimiento de impacto social, hacia un movimiento cultural, hacia un movimiento deportivo; existen determinadas incongruencias con cambios a nivel de país, donde la FEU es protagonista como organización más antigua y joven a la vez. Es hacia ese punto de vista al que el estudiante se está sintiendo un poco aislado y no precisamente con los movimientos internos de la organización. Así que si el estudiante se siente un poco frenado a nivel de país también se siente frenado con la organización que responde a esos cambios a nivel de país”.

La carga docente también resulta muchas veces un impedimento para los estudiantes participar de pleno en las actividades de la FEU. Aunque se sientan identificados ocupan más su tiempo en trabajos y pruebas que en otras actividades extensionistas que también forman parte de la experiencia universitaria.

Carlos Luis Águila, estudiante de Cibernética de la Universidad de La Habana encuentra esta visión y nos explica: “Generalmente hacen bastantes eventos que tratan de unir esos dos campos, sobre todo en mi facultad, que uno se concentra mucho en los estudios y a veces es difícil vincular esas cosas. Pero yo veo que siempre está el intento de tratar de unir la esfera más estudiantil con lo académico”.

Las opiniones se empiezan a repetir cuando haces la pregunta de cómo ven la relación con la FEU, entonces salen a relucir problemas como la desorganización y la poca comunicación. Las soluciones son muchas veces crear espacios de debate donde se puedan expresar las inconformidades, muchos de los cuales ya están creados pero tampoco son aprovechados.

“Siento que es una relación un poco fría por decirlo de alguna forma, cada cual anda por su lado, como quien dice. En esta facultad hay mucha desorganización, no siento en realidad que nos identifican. Yo creo que todo está desde que elegimos a las personas que nos representan, cuando hacen las elecciones muchas veces yo marco por marcar porque en realidad no los conozco”, cuenta Lianni González, estudiante de Medicina de 2.o año de la Universidad de Ciencias Médicas Calixto García.

Este problema lleva un trabajo desde las brigadas. Buscar la manera de que los estudiantes no vean solamente la Universidad como su centro de formación profesional, y ver las raíces de la situación y lo que ocupa y preocupa a los estudiantes hoy.

Javier Sánchez Rivero, estudiante de 2.o año de Sociología y vicepresidente de la FEU de la Facultad de Filosofía, Historia y Sociología nos comenta: “La relación de la FEU en el país con los estudiantes me parece bastante aceptable, en mi facultad no me parece la mejor. Hay poca convocatoria, los estudiantes de aquí son muy atípicos, es muy difícil llamar para cualquier actividad y nosotros tenemos que seguir trabajando en eso”.

ACTIVISMO Y  ANIVERSARIO 96

En este nuevo aniversario de la organización, el objetivo marcado es llevar el protagonismo en las actividades lo tengan las brigadas, las facultades y las universidades. Por ello desde cada uno de los centros se han diseñado un cúmulo de actividades para poder conmemorar esta fecha.

Para seguir con el espíritu que llevó a resolver varios problemas en el 9.o Congreso, la Federación Estudiantil Universitaria llama a todos los centros de la Educación Superior del país a esta fiesta que es de todos.

Desde el 17 de noviembre ya se están haciendo actividades en torno a este nuevo aniversario junto al bastión juvenil universitario y la marcha que se hizo por el día del fusilamiento de los ocho estudiantes de Medicina.

“Se retomaron los carnavales universitarios, que era un reclamo eterno de los estudiantes, y se volvieron a realizar en varios de estos centros, como en Camagüey, Ciencias Médicas de Mayabeque y Guantánamo. Se realizan varias actividades con la población, con noches estudiantiles, karaokes, fiestas de disfraces, caldosas, mesas cubanas y, por supuesto, el desfile de las carrozas que motiva a toda la comunidad universitaria en sentido general”, nos comenta Santiago Jérez Montelier.

“También se desarrolló la activación de las guerrillas universitarias que es una oportunidad para que los estudiantes puedan estar en contacto con la historia pero desde el excursionismo, todo lo que tiene que ver con la naturaleza”, agregó.


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Laura Alonso Hernández

Estudiante de Periodismo


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