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miércoles, 5 de noviembre de 2025

Actualidades

Afuera, hay un mundo amenazado por el egoísmo desmedido....

Julio Cesar Sánchez Guerra en Exclusivo 01/11/2025
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 Un mundo que se desmorona
Un mundo que se desmorona

Son muchas y cambiantes las actualidades de hoy; y no caben en tres cuartillas. De la ventana hacia dentro del país, se mueven  y circulan varias crisis a la vez. Desde afuera, el bloqueo del Gran Vecino que espera la merienda de la vieja fruta con su ley de gravedad; dentro el empacho,  bandazos, corrupción, distorsiones, inflación, fragilización de la vida. Resurgimiento en nuestras calles de escenas que nos parecían distantes en el tiempo y en la geografía.

¿Cómo financiar la justicia social sin recursos financieros sostenibles?  Unos no esperan la respuesta y se marchan a conquistar otro horizonte. Otros, se quedan, y se cansan, y  se levantan y desean un mejor país. El bloqueo, o el embargo, la guerra, como prefiera llamarle, estará ahí,  esperando la asfixia final.

Pero la mejor forma de enfrentar el bloqueo, más allá de la denuncia, es enfrentando nuestro empacho, la falta de creatividad, o de pensamiento hereje que sume todas las voces. Menos improvisación y más auténtica consulta que movilice la participación de la gente.

Por la tele me informan sobre el déficit de generación eléctrica, y circulan los horarios de apagones. Una señora se asoma vendiendo los cigarrillos para poder comer; es un dinerito que se esfuma como el humo. Otro canta el número de la bolita para un golpe de azar. Pero esto no lo oigo por la tele, sino entre el ruido del gentío que busca yuca en el mercado.

Fuera de las ventanas de mi país, circulan noticias preocupantes. Un portaviones en el Mar Caribe, y barcos y amenazas,  dicen que es una lucha contra el narco terrorismo. Tal bandera nos recuerda el destino de Irak, o Afganistán.

¡A otro con ese cuento!  Al  dueño del portaviones le interesa el petróleo, y el gas, y el oro y la geografía tan rica de Venezuela.  Ya hundieron ocho lanchas. ¿Con permiso de quién?  ¿Y hace falta permiso?

Gaza, está llena de escombros, y de muertos bajo las paredes rotas. Es una matanza, como un pequeño holocausto sin cámaras de gas.

Ni la democracia, ni la libertad tan mencionadas, escucharon el grito de tantos niños palestinos.  Ahora, ¿a reconstruir, la ciudad? ¿Y las vidas? ¿Y la paz? Se ha desfondado el derecho internacional, el derecho y la vergüenza.

Rusia y Ucrania, dos viejos hermanos, se disparan a matar. Ucrania, otra punta de lanza en los halcones de la OTAN. Pero, ¡qué duro deber ser para los hijos de Kiev y Moscú, si entre  sus venas corre tanta sangre e historia común!

Hay un problema clarísimo en el andamiaje de noticias y actualidades: El mundo era bipolar. Se hundió un polo y quedó solo uno. Ahora el mundo es multipolar, y el Gran Vecino no acepta que su hegemonía sea desmontada del pedestal.

Hay ejercicios nucleares, cada cual enseña el músculo como un chipojo sacando el pañuelo rojo. Hay señales de guerra y de un mundo que se hunde, o se salva. ¿Depende de quién? Hay algo de caos y locura.

Ahora se me fue la corriente, y debo comprar el pan, llevar comida a los enfermos de la familia. Hacia dentro, hay un país, enormes dificultades. No hay medicamentos.  Pero no quiero pastillas para no soñar; es preciso admirar el valor de la caridad de la luz.

Afuera, hay un mundo amenazado por el egoísmo desmedido. Y si el bote se acerca al borde de la cascada: ¿te sientas en el cactus o en la silla, como se preguntaba un gran artista polaco? ¿Remar a contracorriente? ¿Detener el bote o la corriente? Son preguntas muy difíciles.

Son noticias, actualidades de hoy. Llevo a mi vecino una pastilla para aliviar un gran dolor de cabeza, por la ventana hay un país, y la  mejilla que duele, al alcance de mis manos.

  


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Julio Cesar Sánchez Guerra

Pinero de corazón. Pilonero de nacimiento. Cubano 100 por ciento. También vengo de todas partes y hacia todas partes voy. Practicante ferviente de la fe martiana. Apasionado por la historia, la filosofía y la poesía.


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