República Dominicana a las urnas

Mayo, un mes de lluvia en República Dominicana, es también el de elecciones generales, en las cuales más de seis millones de convocados seleccionarán su dirigentes políticos de los próximos cuatro años, entre ellos el presidente del país y su vice.

Las últimas encuestas efectuadas previas a los comicios de este domingo indican que el actual presidente Danilo Medina (economista nacido en 1951) tiene amplia ventaja ante sus opositores para seguir en el cargo, que ocupa desde hace cuatro años como representante del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).

En septiembre pasado –—y como una de las características de este acto — el PLD y el Partido de la Revolución Democrática (PRD), los dos fundados por el líder político Juan Bosch, firmaron un acuerdo que, opinan expertos, hará imbatible la victoria, pues llevan candidaturas comunes, en especial en los niveles municipales, provinciales y del Congreso Nacional.

El PLD fue fundado en 1973 luego de que Bosch –—la figura más destacada contra el régimen dictatorial de Rafael Leónidas Trujillo (1930-1961 y del gobierno de Joaquín Balaguer, desde 1966)- )— abandonara el PRD junto a un grupo de sus militantes y decidiera, según sus estatutos, la creación de una organización sólida, de líderes con métodos diferentes y una vocación de trabajo por el pueblo dominicano.

De este modo, el PLD fue integrado “por personas de vocación patriótica, que lucha por la libertad, el progreso y el bienestar de los dominicanos y los demás pueblos del mundo, privilegiando su acción política a favor de los grupos más desposeídos y vulnerables de la sociedad”, según lo definió su fundador.

DANILO MEDINA, EL FAVORITO

El actual presidente de los dominicanos, Danilo Medina, del partido de Bosch, es el favorito para mantenerse en el poder. Si gana será un gobierno de unidad nacional con el PRD, que implemente a nivel presidencial, congresual y municipal los fundamentos de un proyecto de nación exigido en el acuerdo firmado con el primer partido fundado por Juan Bosch.

La alianza entre las dos agrupaciones fue suscrita el pasado año, en aras, dijeron sus directivos públicamente, de hacer realidad los conceptos políticos de Bosch, indica el documento rector.
En segundo lugar en las preferencias aparece Luis Abinader, del Partido Revolucionario Moderno (PRM), un poderoso empresario de 48 años que tiene en su contra su inexperiencia política, pero que asegura que Medina pasará a una segunda ronda, aunque sin aclarar el porqué.

Para un alto número de dominicanos que aspira a ser reelecto ha tenido importantes logros en su gestión, sin que ello signifique que quebró algunas de las estructuras del sistema neoliberal imperante en la isla caribeña, sobre la que siempre revoletea la sombra de la injerencia norteamericana.

República Dominicana es un país pequeño, que comparte la isla La Española con Haití, la nación más pobre de América Latina. La economía dominicana se basa en la industria azucarera y en el turismo, fundamentalmente, pues posee una red ya consolidada en ese sector y se considera que hay una gran desigualdad en los ingresos entre sus ciudadanos.

Algunas publicaciones dominicanas, como el Listín Diario, indican que en los últimos cuatro años, sectores vulnerables de la sociedad han sentido algunas mejoras en su calidad de vida.

Como ejemplo están la puesta en marcha del llamado pacto educativo, que entrega al sector de la educación el 4 % del Producto Interno Bruto (PIB) del país, lo que permite elevar la calidad de la enseñanza.

Otro aspecto relevante en la educación es la campaña nacional de alfabetización “Quisqueya aprende conmigo”, que puso especial hincapié en las mujeres iletradas. Un 99 % de las que se encontraban en esa situación fueron a las aulas. También el gobierno extendió el número de horas de clases diarias de cuatro a ocho para un mayor rendimiento escolar.

El sector del magisterio también fue beneficiado, pues más de 140 mil maestros y maestras, casi la plantilla nacional, pasaron por los diversos cursos de formación continua implementados a través del Instituto Nacional de Formación y Capacitación del Magisterio (INAFOCAM).

Son varias las obras que generaron nuevos empleos. En construcción resaltan las nuevas carreteras, avenidas, vías de desarrollo, y puentes que transforman la vida social y económica de ciudades y campos.

Para los dominicanos, dependientes del petróleo exportado, resultó una buena noticia la renegociación de contratos con empresas extranjeras exportadoras del crudo y la construcción de dos plantas a carbón en Punta Catalina de 769.,8 mW, así como varios parques eólicos en las regiones Sur y Este, entre otros proyectos eléctricos, y la renegociación de contratos con las empresas extranjeras productoras de energía.

Medina también impulsó otras medidas, entre ellas la creación de la Banca Solidaria, la ampliación del Sistema de Seguridad Social, los préstamos a microempresarios y agricultores. Son aplaudidas sus visitas sorpresivas a comunidades rurales, que dejaron un impacto en las capas más pobres, pues nunca antes hubo similares desplazamientos.

Otro logro que motivó a los dominicanos fue la aplicación del Sistema Nacional de Atención a Emergencias y Seguridad, nunca antes aplicado en el país, con cámaras de video-vigilancia instaladas en las principales avenidas públicas, y otras herramientas tecnológicas que protegen al ciudadano y contribuye a salvar vidas durante emergencias.

Durante este gobierno del PLD fue creado el Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones, a favor de la calidad y los derechos de los usuarios de los servicios en esa rama, uno de los elementos que el mandatario coloca a su favor al tratar de situar al país entre los desarrollados en esos programas.

No obstante estos considerados éxitos del PLD, también el gobierno tuvo momentos amargos, pues a principios del 2015 se conocieron casos de corrupción administrativa, pero ese partido impidió que prosperaran las acusaciones en los Tribunales, según organizaciones opositoras.

República Dominicana también enfrentó en el 2014 y a principios del 2015 un déficit fiscal de la anterior administración –—también del PLD— por lo que Medina se vio forzado a regular el alza de los impuestos, con el disgusto de la población afectada, pues no hubo discriminación entre ricos y pobres.

ELECCIONES HISTÓRICAS

Estas elecciones del 2016 se consideran históricas para los quisqueyanos.

Por primera vez, y gracias a los cambios constitucionales del 2010, se realizan tres tipos de elecciones el mismo día para escoger a los dirigentes los próximos cuatro años: presidenciales, legislativas y municipales (concejales). Además, también las modificaciones permiten que el presidente sea electo en dos ocasiones.

Son 26 las agrupaciones políticas que disputarán 4 106 cargos, en las 32 provincias del país y 158 municipios, de ellos 3 842 a ese nivel y 262 en el Congreso Nacional.

Serán electos, entre esa alta cifra, 32 senadores, 190 diputados, 20 miembros del Parlamento Centroamericano e igual número de suplentes, 158 alcaldes y sus vice, y 1164 concejales.

Se elegirán los diputados de ultramar, (representantes de los dominicanos residentes en el exterior), ya que En Estados Unidos hay una gran diáspora dominicana, que cuenta con 1,3 millones de personas. Esos emigrantes envían miles de millones de dólares anuales a sus familias, lo que contribuye al desarrollo nacional, con una décima parte del PIB, según datos oficiales.

La Junta Central Electoral (JCE) informó que en el proceso trabajarán 80 000 miembros en los 16 000 colegios electorales, y estarán como invitados representantes de seis organismos internacionales, lo que dará transparencia al proceso.

La palabra la tienen ahora la

s mujeres y los hombres de la tierra del merengue. Si Medina continúa o no, lo dirán las urnas.