¡Felicidades, Habana Compás Dance! (+ Video)

Desde el principio, en 2004, todo fue difícil. Lo fue querer marcar la diferencia, desprenderse de los esquemas aprendidos, conjugar la danza con algo más, vibrar, gustar, crecer…

Catorce años después, ya no son solo aquellas cuatro bailarinas del inicio, sino todo un grupo que además de bailar, incorporan a su rutina la percusión y el manejo vivaz de taburetes y otros objetos que, visualmente, hacen de Habana Compás Dance una propuesta singular desde el espectáculo.

Su directora, Liliet Rivera, agradece que Eduardo Córdoba se haya sumado desde 2009 y que desde la escena, tanto bailarines como músicos hayan logrado fusionar sus aprendizajes y atrevimientos para seducir al público que los sigue.

Este 25 de marzo, en vuelo hacia Turquía, la compañía está de fiesta. Horas antes de viajar, Liliet le adelanta a Cubahora que habrá novedades próximamente, cambios necesarios en la evolución positiva de la compañía.

“Durante catorce años hemos tenido muchos cambios, y ha sido nuestro interés que así sea. La gente nos identifica como los muchachos de los taburetes, y eso nos encanta, pero hace poco mostramos un diseño visual diferente. En la Fiesta del Tambor salimos a la escena con unas cajas, creadas por Córdoba, y eso le gustó mucho al público. En el programa televisivo Bailando en Cuba mostramos unas sombrillas, que son parte de un espectáculo en el que aún trabajamos para estrenar a finales de este año. Queremos hacer un video clip nuevo; ya con el anterior ganamos premio en Lucas por la coreografía y la música instrumental. Y lo mejor es que las personas que nos buscan, el público, sigue siendo nuestra fuente principal de inspiración”.

Liliet comentó, además, que el trabajo con los niños en los talleres como parte del proyecto Danza y Percusión también ha crecido mucho. “Se ven como miembros de nuestra compañía en el futuro y eso demuestra que nuestro esfuerzo no ha sido en vano, que su identidad cultural se ha enriquecido y que sus expectativas han crecido. Nos beneficiaremos, claro, pero ellos son los primeros beneficiados.

“Agradecemos tener nuestra sede, gracias a la Dirección Provincial de Cultura. La hemos arreglado mucho, nos encantaría un local más grande, y trabajamos para ello. Lo más importante es que vamos dejando un legado que ya rinde frutos”.