Una mujer para guiar al Reino Unido

A más de 20 años del gobierno de Margaret Thatcher, “la dama de hierro”, Reino Unido vuelve a ser dirigido por una mujer. Desde el pasado 13 de julio, Theresa May ocupa el cargo de primera ministra. Con un apoyo del 62% de los británicos en las encuestas, May llegó al 10 del Downing Street – residencia oficial y oficina del premier británico -, hasta  las próximas elecciones generales.

Es una de las personas que durante más tiempo ha estado al frente del ministerio de Interior en la historia del país europeo y  desde hace tiempo ha figurado en las listas de candidatos a liderar a los tories, como se les identificaalos miembros del Partido Conservador británico, detalla BBC.

El pasado 23 de junio, los británicos definieron en un referéndum su futuro respecto a la Unión Europea (UE). Un 51, 9% optó por el Brexit (combinación de las palabras Britain, Gran Bretaña, y exit, salida). Mientras, un 48, 1% apoyó la permanencia.

Los resultados del referéndum provocaron caídas en algunas bolsas -aunque después se comprobaría que fue la incertidumbre del primer momento-, ya que poco a poco se fueron recuperando.

Mientras, los líderes europeos de la comunidad se lamentaron de la decisión, pero a la vez hicieron un llamado a no prolongar el inicio de las negociaciones de la separación del Reino Unido.

Tras conocerse las cifras del referéndum a favor de la salida del Reino Unido del bloque regional, David Cameron renunció a su cargo de primer ministro. Por lo tanto, el Partido Conservador se vio obligado a elegir un nuevo líder de la formación tory. Entre los candidatos, May de 59 años fue la clara favorita  para la sucesión de Cameron desde un primer momento.

En este contexto, May, quien mantuvo una discreta oposición a favor del Brexit,  asumió su cargo como nueva primera ministra. Sin dudas, enfrentará grandes retos como el de guiar a Reino Unido fuera de la comunidad y mantener una economía estable y fuerte. 

Para oficializar la salida de la nación europea, se debe activar el protocolo 50 del Tratado de Lisboa. Esto iniciaría un proceso de negociaciones de, al menos, dos años.

La nueva primera ministra será la responsable de negociar los términos de la salida del Reino Unido de la UE.  “Brexit significa Brexit", señaló May poco después de ocupar el cargo, dejando claro sus intenciones.

Sin embargo, precisó que la decisión de comunicar formalmente la separación  a Bruselas "no es previsible que suceda antes de fin de año". La razón, según May, es preparar bien las negociaciones que se avecinan y tener "objetivos claros".

En una conferencia de prensa con la canciller alemana Angela Merkel, la primera ministra británica subrayó que la salida de su país de la UE no significa alejarse de los socios, indicó el diario español El País.

Por su parte, Merkel dijo que es una decisión de los ciudadanos británicos que "debemos respetar", aunque no era la respuesta "que habríamos deseado”.

A pesar del Brexit, insistió que Reino Unido "seguirá siendo una parte de Europa" por lo que abogó por  unas negociaciones sensatas que beneficien a ambas partes.

Para enfrentarse a los nuevos desafíos de su gobierno, May conformó un Ejecutivo con todas las facciones del Partido Conservador, tal como había prometido, al igual que un mayor número de mujeres en cargos públicos. 

En su gabinete incluyó a figuras claves del apoyo al Brexit, como  el ex alcalde de Londres, Boris Johnson, quien es el nuevo canciller británico. A pesar de ser el principal candidato a ocupar la posición de  Cameron, Johnson renunció a esta posibilidad.

El ministerio para la Salida de la UE - reconocido como el ministerio del Brexit-, creado actualmente será dirigido también por un defensor de la salida: David Davis. 

En contraposición, designó a Philip Hammond al frente del ministerio de  Economía y Michael Fallon en el cargo de Ministro de Defensa. Estos apoyaron la opción de la permanencia.

Sobre la economía, Hammond tendrá que ocuparse de  mantener estable la economía británica, pero aseguró que no será necesario un presupuesto de emergencia.

En cuanto a las mujeres en el poder, nombró al frente del ministerio del Interior, la cartera ocupada por ella anteriormente, a Amber Rudd. Además, Liz Truss será la nueva ministra de Justicia, por primera vez, precisó El País.

Desde el nombramiento de May, la comparación con Margaret Thatcher, la otra mujer al mando de Reino Unido (1979 y 1990), ha sido inevitable. De igual manera, ocurre con Angela Merkel.  Y es que cuando los medios de prensa hablan de May, la actual canciller alemana y “la dama de hierro” son los  ejemplos claves para abordar el tema de las mujeres en el poder.

Los vínculos entre Merkel y May provienen de su participación en la vida política europea y de su fuerte carácter. Además de sus creencias religiosas y su familia. Ambas tuvieron padres pastores protestantes, una educación rígida y no tienen hijos, afirman medios de prensa.

Según BBC, las dos tienen una reputación de ser buenas negociadoras y tienen un enfoque no ideológico y flexible para la resolución de problemas.

Por otra parte, su similitud con Thatcher recae en su papel en la política británica y su carácter. El periódico "The Independent" se refirió a ella como una "Dama de Hierro en lista de espera" y "una persona muy reservada" a diferencia de muchos políticos. "The Guardian" la calificó de "inescrutable" y de una "política de ideas sobrias".

Analistas y periodistas destacan que aún es temprano para afirmar si el comportamiento político de May será similar al de su predecesora “la dama de hierro”.

Para May, las prioridades ahora son “la necesidad de un liderazgo fuerte y fiable que nos guíe en un momento económico y político de incertidumbre, la necesidad de negociar el mejor acuerdo para Reino Unido en la salida de la UE y forjar una nueva función para nosotros en el mundo”.

“Tenemos un enorme trabajo por delante: unificar al partido y al país, negociar el mejor acuerdo posible al abandonar la UE, y hacer que el país funciones para todos”, defiende la mujer al Reino Unido ante pronósticos de difíciles conversaciones con el bloque regional.