Guatemala: el ¨eterno candidato¨ ganó al fin la presidencia

Alejandro Giammattei, político de extrema derecha que fracasó en sus tres intentos anteriores para obtener la presidencia de Guatemala, ganó en esta ocasión en medio de la apatía de una ciudadanía que posee más dudas que certezas sobre lo que le espera en los próximos cuatro años.

Giammattei, del partido Vamos, venció en los comicios del pasado domingo a Sandra Torres, de similar ideología y ex primera dama del país, que aunque pasó a segunda vuelta con margen a su favor no alcanzó después la mayoría para asumir el gobierno dejado por el músico evangelista Jimmy Morales, indicado como corrupto y de practicar tráfico de influencias.

En opinión de analistas, los guatemaltecos solo podrán esperar de su nuevo mandatario que asumirá en enero próximo la continuidad de una política hiperconservadora encaminada a mantener la espinosa situación de pobreza, corrupción, inmigraciones masivas y violencia existente en ese país del itsmo centroamericano.

Para el experto Mario Sosa, no hay algún indicio de que Giammattei de curso a un modelo diferente al impuesto por Estados Unidos (EE.UU.), caracterizado por asumir a esa nación como productora de materias primas y proveedora de fuerza de  trabajo barata, con énfasis de la extracción de recursos naturales y la aniquilación de comunidades pobres.

En ese país viven 19 millones 658 562 ciudadanos, de acuerdo con el Registro Nacional de Personas, y fueron convocados a votar ocho millones, de los cuales se abstuvieron más de tres millones, luego de una polémica campaña repleta de irregularidades, acusaciones de fraude en la primera vuelta y un ambiente caldeado y de tensión en las calles.

Solo el 14,6% de los guatemaltecos adultos confían en los partidos políticos, de acuerdo con una encuesta independiente publicada en la prensa local poco antes de la primera vuelta electoral.

Resultados Preliminares de Elecciones en Guatemala (Imagen: Tribunal Supremo Electoral de Guatemala)

Muchas incógnitas, que aún se mantienen, dejaron tanto Torres –acusada de corrupción junto a su ex marido, el ex presidente Álvaro Colom- como el electo Mandatario. Las preguntas más comunes son cómo Giammattei eliminará la pobreza en que vive el 59,8% de la población y el trabajo infantil, casi la mitad de sus niños menores de cinco años -49,8 por ciento- con desnutrición crónica, la tasa más alta de América Latina; que hará sobre el acuerdo de ¨tercer país seguro¨ firmado con EE.UU.; reemplazará o no a la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig, dependiente de la ONU) y cómo frenarán las caravanas de migrantes (otro 1,5% de la población en los últimos seis meses).

La politóloga guatemalteca Simona Yagenova, miembro de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), define la actual situación como ¨un modelo de imposición económico, político y sociocultural mafioso, de militares y oligarcas que saquean al Estado y se roban millones y millones del bien público.

El hecho es, precisó, que las mafias y las organizaciones criminales de control territorial han penetrado en el propio Estado, desde donde crean redes de contrabando¨.

A pesar de las protestas callejeras, las acusaciones de organizaciones sociales, Giammattei evitó pronunciarse sobre los agudos problemas de la nación guatemalteca, una de las más violentas, además, de la región centroamericana.

Dos semanas antes de las elecciones, el saliente Morales firmó un acuerdo con EE.UU. de "tercer país seguro" que obliga a Guatemala a brindar techo, trabajo y alimentación a miles de centroamericanos migrantes mientras esperan su trámite para entrar en territorio norteamericano.

Queda la posibilidad de que la Corte Constitucional y el Congreso rechacen un tratado suscrito casi al término de su mandato, lo que libraría al país de una carga económica imposible de sostener, a no ser que los norteños asuman los gastos, lo que no parece por ahora.

Guatemala es considerado uno de los diez países más desiguales del mundo, por lo que, entre otras causas, miles de habitantes, en especial de pueblos indígenas y campesinos, migren hacia EE.UU. en busca de mejores condiciones de vida.

Las remesas que cada año envían los guatemaltecos radicados en el país del norte representan un 10% del Producto Interno Bruto (PIB) y este año las previsiones de la Junta Monetaria (JM) es que se llegue a los 10 mil 100 millones de dólares.

La información sobre la emigración nacional es muy escasa, se encuentra dispersa o no está sistematizada; inclusive, algunas cifras no están actualizadas, aseguró la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (ASIES). En el estudio Migración en cifras, realizado por esa entidad, pudo comprobarse que  ¨Guatemala está en la tercera posición entre los países con más población viviendo en EE.UU., después de México y El Salvador", refirió su autor Andrés Navas, consultor del Departamento de Investigación y Consultoría Económica de ASIES.

El mandatario electo no muestra interés en prolongar la estadía de la Cicig,  institución que presentó pruebas contundentes contra Morales, Torres y su exmarido por corrupción. La Cigic cumplió su cometido de limpiar la vida pública con el procesamiento de más de 800 empresarios, políticos, militares y una cuarta parte de los diputados.

El músico Morales expulsó a la organización del territorio nacional, pero la ONU esgrimió que su contrato terminaría en septiembre próximo, por lo que sus funcionarios permanecerán allí hasta ese mes, y no se espera que el nuevo gobierno, que asume en enero próximo, se manifieste al respecto.

Rasgos del nuevo Presidente

Giammettei, 63 años, es un conocido pero poco valorado –al menos hasta ahora- por la población, que en tres ocasiones anteriores rechazó su postulación, por distintos partidos, a la Primera Magistratura en los años 2007, 2011 y 2015.

Nacido el 9 de marzo de 1956, estudió la carrera de Medicina en la Universidad de San Carlos, donde se graduó en 1980. Dos años después, fue nombrado consultor de la Organización Panamericana de la Salud durante cuatro años.

El llamado ¨eterno candidato¨ se postuló ahora por el derechista partido Vamos, y en un adelanto de su gestión afirmó que estaba en contra del matrimonio igualitario, el aborto, y a favor de la pena de muerte y la represión policial, además de que encarcelará a su rival Torres por actos de corrupción.

Al concluir sus servicios en el Cuerpo de Bomberos en 1990, pasó a ser Gerente general de la Empresa Municipal del Agua.

Su vida política comenzó en 1985 como coordinador general de los procesos electorales hasta 1990. Ha sido consultor de varias empresas y servicios privados desde el 2000 hasta ahora, sin que abandonara su interés por ocupar la Presidencia.

Fracasó en sus dos intentos en las elecciones por la Alcaldía de la Ciudad de Guatemala en 1999 y 2003.

Cuando era Director del Sistema Penitenciario se vio envuelto en un escándalo por la ejecución extrajudicial de siete reos bajo su responsabilidad.

Acusado por el Ministerio Público y la Cigic cumplió 10 meses de cárcel, pero dada la impunidad existente debido a un sistema judicial corrupto, salió con el expediente limpio.

Para la analista Carolina Vasquez Araya ¨la democracia brilló por su ausencia desde el momento mismo cuando se impuso a la fuerza la elección entre dos candidatos sospechosos de delitos electorales, de vínculos con el narcotráfico y de ejecuciones extrajudiciales amparadas por un sistema judicial corrupto. Es decir, la peor de las perspectivas¨.

En un artículo publicado en su Blog, Vasquez Araya precisó que con Giammettei ¨el cambio necesario y urgente quedó pospuesto otros cuatro años en los cuales las irregularidades del gobierno saliente podrá caer en niveles extremos.¨.

Para el analista político Gabriel Wer, "hay un hartazgo con la clase política actual", que se refleja en el futuro presidente, pues su legitimidad se ve afectada por esta poca participación, que rondó el 35 por ciento.

El nuevo presidente, con seguridad, se someterá a las políticas estadounidenses. Guatemala continuará bajo las políticas resultantes del Tratado de Libre Comercio (DR-Cafta), del Plan de la Alianza para la Prosperidad del Triángulo Norte, y a las im posiciones en materia migratoria, de seguridad y de control territorial, así como a la doctrina Monroe, que inspira la estrategia de injerencia y agresión de EE.UU. y en la cual Guatemala actúa como peón de su ajedrez.