Dos dianas…un solo tiro

Es interesante percibir cómo ciertos intereses agresivos y dueños de poderosos instrumentos mediáticos, llegan en su  desmesurada autosuficiencia a deslizar campañas que, bien vistas, desdicen incluso de la proclamada efectividad de los medios gringos de espionaje y subversión.

 Y se trata de que hace unas horas el rotativo norteamericano The New York Times, reveló poseer un documento que “debe ver la luz este marzo en el Consejo de Seguridad de la ONU”, en el cual “expertos” del organismo internacional (no identificados ni listados, por cierto) aseveran que Corea del Norte entregó partes de misiles y bombas de gases tóxicos a Siria entre los años 2012 y 2017.

Según los soplones de este “tremebundo descubrimiento”, los norcoreanos hicieron esas transacciones en violación de las “sanciones impuestas a Siria”, y  precisan que aún hoy hay expertos de Pyongyang trabajando con Damasco en el desarrollo de sistemas balísticos y armas altamente letales.

Y ahora viene la otra parte… ¿dónde estaban entonces la CIA y las restantes entidades norteamericanas de espionaje, que en todo un quinquenio ni se olieron el “tráfico mortífero” entre Corea del Norte y Siria, aun cuando para esos años Damasco ya enfrentaba la guerra terrorista impuesta por Washington, sus aliados de la OTAN, Israel, las satrapías árabes y los extremistas islámicos armados, entrenados, pagados y protegidos por semejante orquesta?

¿Es posible tragarse el cuento de que sobre una nación condenada a desaparecer por los designios hegemónicos no actuaba casi en pleno todo el aparato de inteligencia y subversivo Made in USA y de sus socios de correrías?

¿En qué utilizaban estos señores entonces sus antenas, satélites, centros computarizados, drones, interceptores, programas digitales de espionaje global, grupos de tarea, oficiales de campo, agentes, informantes pagados, y todo de cuanto hacen alarde para advertirle al mundo que no hay vuelo de mosca en cualquier rincón del que no se enteren?

En consecuencia, vale creer muy en serio que esta oportunista historieta de horror y misterio es tan “cierta” como la de que Iraq poseía armas de destrucción masiva que nunca- jamás fueron encontradas…o que Rusia “invadió” Crimea después que los “patrióticos” neofascistas ucranianos se hicieron del poder en Kiev mediante “el ejercicio de la más impoluta democracia”…o que Venezuela constituye una amenaza terrible a la “seguridad nacional de los Estados Unidos”…sin olvidar la lista nunca revelada de diplomáticos norteamericanos radicados en Cuba víctimas de “arteros ataques sónicos” tampoco descritos en forma responsable y seria.

Y lo dicho en líneas precedentes es solo un resumen al vuelo, porque si vamos a la larga historia oficial norteamericana, de burdas mentiras y sucios manejos está empedrado todo su tramposo camino en política interna y externa.

Por lo pronto, habrá que esperar si finalmente el citado informe de expertos no nombrados  sale a la luz, y solo insistir en que, si fuese por las acusaciones norteamericanas a lo largo de todos estos años de agresión a Siria, ese país nadaría sobre almacenes ocultos de gases tóxicos, no importa que en 2014 Damasco desmantelara tales artefactos y en enero de 2016 la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas anunciara su total destrucción.

Ah, sí, Damasco confirma que en Siria hay norcoreanos, solo que entrando a equipos deportivos locales, especialmente en el área de gimnástica… y tal vez ahora deduzcan y denuncien Washington, la CIA el FBI, el Pentágono y el Consejo Nacional de Seguridad, que se preparan “en comunión diabólica para dañar en el futuro inmediato a los atletas norteamericanos”.