miércoles, 25 de septiembre de 2024

Pinball Club: mover algo del lugar, lo hace nuevo (+Fotos)

Los artistas nóveles de 5to año de artes visuales de la Universidad de las Artes ISA, expusieron sus propuestas de tesis el pasado 15 de julio en la Galería Servando, ubicada en 23 y 10 en el capitalino municipio del Vedado...

Lissey del Monte Valdés en Exclusivo 18/08/2022
0 comentarios
Pinball Club
La exposición contó con su apartado online a través de códigos QR (Lissey del Monte Valdés / Cubahora)

Titulada Pinball Club, la génesis de la actual exposición que estará disponible hasta finales del mes de agosto, se distingue por el propio dinamismo del juego nombrado Pinball, ya que la bola es la premisa conceptual y curatorial de la exhibición, la cual se mueve de un lugar a otro en el espacio de la galería.

Omar Tirado (Santa Clara) Brenda Cabrera (La Habana), Héctor Onel Guevara (Villa Clara), Yamil Orlando (Punta Arenas), Daimely Lorenzo (Pinar del Río) y UPS!, son los protagonistas de estas piezas interactivas posicionadas en las paredes blancas de la Servando, siendo cada una de ellas de por sí, independientes.


Algunos de los primeros espectadores en ver la exposición. (Lissey del Monte Valdés/Cubahora)

Instalación, artes plásticas, ilustración, video y performance continúan siendo algunas de las manifestaciones artísticas presentes. Según las palabras de la profesora del ISA Laritza Suárez del Villar, cada pieza expuesta representa “el genio creador” e individual de cada “artista”, que si algo los une es la meta grupal por trasgredir o golpear lo institucionalmente establecido en el arte.


Detalles de la obra de Daimely Lorenzo. (Lissey del Monte Valdés/Cubahora)

“En algunos casos hay soluciones creativas y un tanto novedosas desde la sencillez y obviedad de la tesis manejada. En otras, se trata de un reciclaje artístico de fórmulas repetidas y ya conocidas, como el propio Pinball, que ha sido tantas veces versionado” comenta Suárez del Villar.

La proyección Cruces-Fatima, de Yamil Orlando, está compuesta por 30 videos a color con una duración total de dos minutos. Gracias a ella, el espectador puede reflexionar sobre nuestra contemporaneidad. A criterio de su autor, esta pieza pretende con la recreación de tomas de películas cubanas, hacer alusión al proceso artístico corrompido, que pone en tela de juicio la originalidad de la propia obra.


Cruces-Fatima de Yamil Orlando. (Lissey del Monte Valdés/Cubahora)

Dentro de las propuestas del día inaugural, estuvo el performance We like to make Money, realizado por la entidad colectiva de creación visual titulada Ups!, compuesta por los artistas por Héctor Onel y Marlon Riberón.

La creación, radicó en que cada uno de los presentes contribuyera con el evento, brindando 1 CUP como el pago de la entrada. Luego, con la ayuda de un simpático payaso (Marlon Riverón Escobar) y sus habilidades para hacer sonreír y deleitar al público a través de algunas notas tocadas con la trompeta, el proyecto contó y dividió delante de todos los presentes el presupuesto recaudado, reflexionando así sobre las diversas formas de ayudar a los artistas contemporáneos de la Isla.


Marlon Riverón Escobar, miembro de UPS!. (Lissey del Monte Valdés/Cubahora)


Entidad colectiva de creación visual UPS!

“Trabajamos con la frontera entre realidad y artificio, generando situaciones abiertas con los atributos que son propios de cada contexto. Nuestro objetivo principal es poner a prueba los conceptos de ficción y simulacro dentro y fuera del campo del arte" describen los artistas que componen UPS!

Otra de las obras presentes es la de Héctor Onel Guevara, nombrada Senescencia. El templo de las ratas; óleo sobre lienzo elaborado en diferentes capas que juega con el concepto de “Nantaimori” o más conocido como la práctica de comer encima del cuerpo de una mujer, pero también con el significado frases como: Ritual Kurk, el amarillo es repulsivo, birth day, after party, la meseta y luz roja.


Senescencia. El templo de las rata, de  Héctor Onel Guevara. (Lissey del Monte Valdés/Cubahora)

Por otro lado, Daimely Lorenzo, llenó el espacio de colores, dibujos y recortes con su instalación El lugar que nunca fue, donde el objeto encontrado es casi una justificación para el objeto escogido. “Constantemente guardamos "imágenes" que nos gustan, y tenemos el impulso de crear... Y se nos acumulan: desde una idea plástica hasta la tarea más común, las responsabilidades y la vida" comenta la artífice de tan creativo material gráfico.


El lugar que nunca fu, de Daimely Lorenzo


Parte de las obras de Brenda Cabrera. (Lissey del Monte Valdés/Cubahora)


Escena VI y VII de Omar Tirado.


Compartir

Lissey del Monte Valdés

Apasionada del arte y la cultura. La música, es mi motivación para escribir. Periodista inquieta


Deja tu comentario

Condición de protección de datos