Cuando la Nube se acerca a la tierra

La “computación en la niebla” es una infraestructura descentralizada en la que los datos, el cómputo, el almacenamiento y las aplicaciones están distribuidos en el lugar más lógico y eficiente entre la fuente de datos y la nube. Se trata de extender los servicios de la computación en la nube y al borde de la red y de esta forma acercar las ventajas y el poder de esta al lugar donde se crean los datos y se interactúa con ellos. El objetivo de la niebla es mejorar la eficiencia y reducir la cantidad de datos transportados a la nube para su procesamiento, análisis y almacenamiento; aunque también puede ser utilizada por razones de seguridad.

La niebla viene del término meteorológico para una nube cerca del suelo, justo como la niebla se concentra en el borde de la red; se cree que el gerente de línea de productos de la compañía Cisco, Ginny Nichols, acuñó el término. Cisco Fog Computing.

¿CÓMO FUNCIONA?

Aunque los dispositivos de borde y los sensores están donde se generan y recopilan los datos, ellos no tienen los recursos de cómputo y almacenamiento necesarios para realizar tareas avanzadas de análisis y aprendizaje automático. Si bien los servidores en la nube tienen el poder de hacerlo, normalmente se encuentran lejos para procesar los datos y responder de manera oportuna. Además, tener todos los puntos finales conectados y enviar datos en bruto a la nube a través de internet tiene implicaciones para la privacidad, la seguridad y la legalidad, especialmente cuando se trata de datos sensibles sujetos a regulaciones. Se debe tener en cuenta que las redes en la niebla complementan, no reemplazan, a la computación en la nube; la niebla permite análisis a corto plazo en el borde, y la nube realiza análisis a largo plazo que requiere muchos recursos.

Muchas veces se utilizan los términos computación en la niebla y computación en el borde de forma intercambiable, lo cual no es exacto. En un ambiente de niebla, la inteligencia está en la red de área local y los datos se transmiten desde puntos finales a una pasarela, donde luego se transfieren a las fuentes para procesamiento y transmisión de retorno. En la computación en el borde, la inteligencia y la potencia del dispositivo de borde se encuentran en dispositivos tales como controladores de automatización programables.

COMPUTACIÓN EN LA NIEBLA E INTERNET DE LAS COSAS

Debido a que la computación en la nube no es viable para muchas aplicaciones de internet de las cosas, la computación en la niebla puede ser la solución. La computación en la niebla reduce el ancho de banda necesario y reduce la comunicación de ida y vuelta entre los sensores y la nube, lo que podría afectar negativamente el rendimiento de internet de las cosas. Los retrasos en la transmisión de datos en muchos escenarios de internet de las cosas pueden poner en peligro la vida; por ejemplo, en sistemas de comunicaciones vehículo a vehículo, despliegues de red inteligente, entornos de telemedicina y de atención al paciente, donde los milisegundos son importantes. Los casos de uso de la computación en la niebla e internet de las cosas incluyen también ferrocarriles, fabricación y servicios públicos inteligentes.

BENEFICIOS

Fundamentalmente, el desarrollo de marcos de computación en la niebla brinda a las organizaciones más opciones para procesar datos donde sea más apropiado hacerlo. Para algunas aplicaciones, los datos pueden necesitar ser procesados lo más rápido posible, por ejemplo, en un caso de uso de fabricación donde las máquinas conectadas deben ser capaces de responder a un incidente inmediatamente.

La computación en la niebla puede también crear conexiones de red de baja latencia entre dispositivos y puntos finales de análisis. Esa arquitectura reduce la cantidad de ancho de banda necesaria en comparación con la necesidad de enviar los datos a un centro de datos para su procesamiento. También se puede usar en escenarios donde no hay el ancho de banda necesario para enviar datos, por lo que se deben procesarse cerca de donde se crearon. Como beneficio adicional, los usuarios pueden establecer características de seguridad en una red de niebla.

APLICACIONES

Autos conectados: El advenimiento de los autos semiautónomos y autónomos solo aumentará la ya gran cantidad de datos que crean los vehículos. Tener autos operando de manera independiente requiere la capacidad de analizar localmente ciertos datos en tiempo real, tales como el entorno, las condiciones de manejo y las indicaciones. Un entorno de computación en la niebla permitiría las comunicaciones para todas estas fuentes de datos, tanto en el borde (en el automóvil), como en su punto final (el fabricante).

Ciudades inteligentes y redes inteligentes: Al igual que los autos conectados, los sistemas de servicios usan cada vez más datos en tiempo real para que los sistemas funcionen de manera más eficiente. A veces, esos datos se encuentran en áreas remotas, por lo que el procesamiento cerca de donde se crearon es esencial. Otras veces, los datos deben agregarse a partir de una gran cantidad de sensores. Las arquitecturas de computación en la niebla podrían ser ideadas para resolver estos dos problemas.

Análisis en tiempo real: Una gran cantidad de casos de uso requieren de un análisis en tiempo real. Desde los sistemas de fabricación que deben ser capaces de reaccionar a los eventos a medida que suceden, hasta las instituciones financieras que usan datos en tiempo real para informar las decisiones comerciales o controlar el fraude. Las implementaciones de la computación en la niebla pueden ayudar a facilitar la transferencia de datos entre su lugar de creación y una variedad de lugares a los que debe ir.

En Cuba poseemos el caso de la empresa Cupet, la cual ha desarrollado proyectos de computación en la niebla en el área del petróleo. En sentido general, los profesionales graduados en las universidades tecnológicas del país poseen los conocimientos y habilidades necesarias para llevar a buen puerto esos proyectos. Sin embargo, se necesita que el empresariado, sobre todo del sector industrial, ponga manos a la obra. Ojalá que eso sea pronto

Ah, recuerden, si me ven en algún lugar, me saludan.