Reconforta ver a jóvenes intérpretes acudir con respeto a las fuentes patrimoniales de la música. Revisitar temas antológicos, clásicos, para devolvérnoslos como nuevos. No me refiero a cambiarle el empaque, con retoques superficiales, con coloretes tímbricos, sino, a su enriquecimiento y re-significación. Al presentarlo desde otro ángulo, desde otro tiempo y concepto. Al actualizarlos, con las posibilidades que les brinda la interconectividad de un mundo globalizándose, de expandir su mirada hacia otros referentes, remotos o invisibilizados hasta entonces, con más recientes acumulaciones creativas. Sumadas, a las nuevas posibilidades tecnológicas, que permiten samplear sonidos y alterarlos digitalmente.; con el valor agregado de presentarlo desde otro ángulo, desde otro tiempo y concepto.
Ensayé esta satisfacción al evaluar los videos presentados para esta edición de Los Lucas. Sobre todo, al ser interpretados por artistas noveles, incluso estudiantes del ISA.
Se destaca entre ellos la versión del joven cantante identificado como Daniel del conocido tema “Yiri yiri bon” del compositor, actor, bailarín, showmen y director de orquesta Silvestre Méndez y popularizado por el gran Benny Moré. Un video coreográfico de meticulosa factura presentado en blanco y negro, dirigido por Alejandro Pérez, protagonizado por estudiantes de la Universidad de las Artes, firmado en icónicas locaciones de este recinto.
Por las redes también circula un reto bailable del tema.
Con un empaque más contemporáneo se actualiza el “María caracoles” del percusionista y creador del ritmo mozambique Pello el afrokán (Pedro Izquierdo Padrón). La nueva versión, cocinada por el productor Frank Jordan (Frankii) y el experimentado arreglista Alain Pérez, nos la regala la joven Gabi Herrera, nombre artístico de la vocalista del proyecto Vitrola Cuba Mix que dirige el realizador Alejandro Pérez. El consagrado director del videoclips, ideó un audiovisual muy a tono con los aires renovados de la propuesta musical, un performance sobre ruedas de una mariacaracoles moderna.
Sobre el reto de lo bailable, plato fuerte del audiovisual, comentó la joven cantante : Para la realización del video tuve que prepararme y estoy muy agradecida por la ayuda de Roclan en este proceso. Siento que fue como una señal cósmica ya que casualmente este año se cumplen también los 60 años de la creación del baile por lo que fue más que un honor hacerle un homenaje con esta canción. La juventud conocerá el baile y su riqueza rítmica. La fusión funcionó muy bien, es una de mis canciones preferidas”.
También se presentó a la competencia el videoclip de “La negra Tomasa”, defendida por Lemuell, el hermano de Daniel y otra de las propuestas de Vitrola Cuba Mix .
Otra versión que “amenaza” con acaparar varias nominaciones y premios Lucas 2022, es la de “Silencio”, un bolero escrito por el compositor y músico puertorriqueño Rafael Hernández, que hiciera Luna Manzanares, acompañada de la inmensa Omara Portuondo, con arreglo de Jorge Aragón y ejecutado por la orquesta del Liceo Mozartiano de La Habana, bajo la dirección de Pepe Méndez. El video, dirigido por el multipremiado Joseph Ross, merece más espacio para comentarlo.
“El pasado año, también disfrutamos de las recreaciones visuales de temas tradicionales o ya clásicos. El videoclip de una versión resultó el Mejor Video del Año en la anterior parada de los LUCAS. Recordemos la recreación audiovisual de Roly Peña y Alejandro Pérez de la interpretación de Santiago Feliú de la criolla “El Mambí” de Luis Casas Romero, estuvo entre los más nominados y premiados en el más importante certamen del videoclip cubano.
Otros de los reconocidos por el jurado fue el animado de la versión que hiciera Pao Fraga de “En tu vestido”. Además, estuvieron entre los videoclips nominados el del “Popurrit de Son 14”, interpretado por Alexander Abreu, Mayito Rivera y Alain Pérez y “La sitiera”, por The Mavericks.
- Consulte además: El Mambí, el más integral de Los Lucas 2021
Homenajes ha habido desde antaño, desde que surgieran los discos como soportes de reproducción de la música. En 1907, por ejemplo, Enrico Caruso hizo grabaciones de la ópera de Ruggero Leoncavallo. Aunque el nacimiento del disco homenaje moderno se le atribuye al productor Hal Willner, con el LP Amarcord Nino Rota, de 1981.
En Cuba, tenemos como muestras recientes los homenajes que hiciera la banda Real Project, con temas del Grupo de Experimentación Sonora del ICAIC (GES). El álbum Real Project-GES (Bis Music, 2019) se integra con 10 títulos, entre instrumentales y canciones, en los que los arreglistas Ruly, Lagarza y Roberto Luis experimentan con las continuidades de aquellas rupturas fundadoras del GES. Sus propuestas son versiones actualizadas, retocadas y trastocadas con timbres electroacústicos, con los códigos del rock y la poética del jazz. Según los tiempos sonoros que corren y el propio estilo de la agrupación.
El videoclip de “Repentino”, con la invitación de Niurka González y Yasel Muñoz, fue nominado en la edición pasada de Los Lucas en las categorías de Música Instrumental y Video del año.
Una actualización paradigmática, hasta el extremo de la recreación, es la que propone Rosalía en su disco Motamami. Me refiero, a su “Delirio de grandeza”, su revisita a un bolero de los 50, del cubano Justo Betancourt. Otra de las maravillas del disco, en el que la española vuelve a demostrar no solo la fuerza como intérprete, sino sus amplios referentes musicales y su vocación experimentadora, para desdibujar las fronteras de los géneros y los sonidos. Los productores filtran el viejo tema y le suman voces aceleradas de Vistoso Bosses y Soulja Boy. El bolero se rompe con una voz al final cantando en inglés, la de Frank Ocean.
A propósito, contó la artista al youtuber Jaime Altozano: "Lo hice para intentar darle la vuelta a un bolero, me encantan los boleros y es un género que lo estaba escuchando mucho. Tenía ganas de hacer un bolero en este disco, pero para empezar en el bolero dije 'déjame cantar uno clásico primero'. Está sampleada la instrumental en sí, de ese bolero, pero cambiada de ritmo".
- Consulte además: Motomami: ¿la Fountain de Rosalía? (III)
Recientemente, fue noticia el homenaje del meteorito Bad Bunny a la vieja estrella Elvis Crespo. Se trata de esa especie de calco que hiciera con su videoclip de “Neverita” a la fantasía audiovisual de “Suavamente”, publicado en 2009. En el corto, se ve al marcosaurio con el pelo rizo, como un adolescente que baila electrónica en un club de los 90, e imitando las vestimentas del merenguero.
Y por si no bastara la reproducción plano a plano del video referente, los realizadores o el boricua- vaya a saber-, rescataron el formato cuadrado (1:1) y la resolución máxima de 480p, los habituales en aquellos videos que inauguraron a YouTube. Aunque para compensar, la renuncia a los actuales patrones (HD y formato 16:9), se hace guiño a las generaciones más jóvenes con los stickers, los memes y los zumbidos de Messenger.
A través de redes sociales, el merenguero aseguró que le había encantado el material estrenado por el 'Conejo Malo'. "Ayer me entero de que Benito lanza una canción de su álbum, 'Un verano sin ti', que se titula 'Neverita', y utilizó visuales inspirados en el video de 'Suavemente'. De veras que me gustó muchísimo, me encantó", expreso en un video publicado en su cuenta de Facebook. Mientras, en TikTok y en Instagram, compartió un clip secundario, con ayuda del filtro 'green screen/croma', para comparar su éxito y el del boricua.
Un modo de complacer a nostálgicos y de traer al presente temas que fueron éxitos y/o son joyas del patrimonio musical, local y/o global.
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