El softbol masculino lleva como propósito a los XXIV Juegos Centroamericanos y del Caribe San Salvador 2023, retener la corona alcanzada en Barranquilla 2018.
La justa se desarrollará en solo seis días, en los que nuestra selección debe efectuar ocho partidos. El torneo contará con siete equipos y se jugará por el sistema de todos contra todos. Los dos primeros lugares discuten las medallas de oro, mientras que tercero y cuarto pugnan por las de bronce.
La ausencia de Bahamas, uno de los equipos más débiles de la justa, hace que se concentre más la calidad, y que prácticamente no haya enemigos pequeños durante la justa.
Cuba debuta el día 24 de junio ante México, uno de sus principales rivales, y un día después juega frente a Colombia. La jornada más complicada será la del 26 porque tiene doble cartelera ante Venezuela, actual subcampeón del torneo y República Dominicana, que tampoco será un manjar.
Si después de estos cuatro juegos el equipo que dirige Leonardo Cárdenas tiene buen balance ya tendrá la clasificación en el bolsillo porque concluye contra El Salvador y Guatemala (jugará bajo la bandera de la WBSC), a todas luces rivales inferiores a los cuatro primeros.
Para Cuba resultará vital la forma física en la que se presente Alain Román. Si el mejor lanzador de Cuba puede tirar todos los días, las opciones crecerán porque Gusbel Plutín ya no es el mismo a sus 48 años. El tercer serpentinero Rafael Guerra, a pesar de su experiencia competitiva en Cuba, no tiene rodaje internacional.
El otro aspecto en contra para esta selección es que nuevamente llega sin un partido internacional a una gran competencia. De nada ha valido un ciclo con un bronce panamericano y un quinto lugar mundial.
Otra vez la ofensiva, sin apenas ver lanzadores de nivel, tendrá que hacer el trabajo sobre todo contra México y Venezuela, a priori los dos contrincantes de mayor nivel.
Yesander Rodríguez, Yuri Rodríguez, Reinier Vera, Reinaldo Lamothe y compañía tendrán que fabricar las carreras necesarias para que Alain Román, el gran caballo de batalla, siga guiando a su legión.
Importante para Cuba no dejar victorias en las tres primeras jornadas para poder dar descanso a su líder de rotación frente a los conjuntos más débiles, y que llegue sin tanta carga a la discusión del título.
Repetir la corona de Barranquilla es una meta posible, pero el calendario será muy exigente con ocho partidos en seis días. Pero, los guerreros de Cuba no creen en imposibles. En el deporte de la bola blanda la batalla siempre será dura contra Cuba.
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