Lo que la mayoría predijo está a punto de cumplirse: Agricultores fuera de la semifinal. El equipo cubano ganó su primer juego en la Serie del Caribe, pero después ha hilvanado una cadena de cuatro derrotas.
Este lunes, Vaqueros de Montería fue el victimario en otro choque cerrado, decidido por una carrera como el del domingo. Confirma el esfuerzo, pero con eso no se gana. Quedaron al desnudo, otra vez, esos detalles que parecen onzas y en realidad pesan toneladas.
El mentor Carlos Martí se decidió, al fin, a mover su lineup. Subió a Guillermo Avilés al tercer turno, puso a Dennis Laza de quinto y bajó a Yordanis Alarcón al sexto y a Rafael Viñales al séptimo, aunque mantuvo la confianza en los mismos nueve bateadores.
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Su banco no le da muchas oportunidades y él lo sabe. Porque ahí hay muchachos que hicieron el viaje como premio a su esfuerzo, a su entrega bajo el sol y hasta por alentar a los titulares en los momentos más tensos de la Liga Élite del Béisbol Cubano (LEBC).
A Yordanis el movimiento le resultó: bateó de 3-3 con dos impulsadas. Dijo que había hecho ajustes ante un picheo muy diferente al que enfrenta en Cuba. Debería compartir la fórmula con sus compañeros.
Viñales salió del slump que lo tenía muy ansioso, al menos ya ligó su primer imparable: un tubey remolcador y Andrés de la Cruz sigue confirmándose como el más oportuno del grupo; de hecho, su average de .294 está muy por encima del .213 colectivo del equipo.
Apenas fueron seis jits ante cinco lanzadores de los cafeteros. Con esa anémica producción ofensiva no se puede aspirar a más vueltas, y el picheo ha estado estresado todo el tiempo.
Sin nombres y con una pobre caja de herramientas, los lanzadores han estado por encima de sus potencialidades. Olvidémonos del juego del sábado ante Leones de Caracas. Lo de esa noche es la excepción.
Y hagamos un alto aquí. Esa misma tanda venezolana que apaleó a Cuba sin misericordia solo conectó par de incogibles anoche ante Cañeros de los Mochis y recibió blanqueada ante su público.
El béisbol es un deporte impredecible, rico en opciones. Cada juego es diferente. Los Leones van registrando la mayor cantidad de jits en un partido y también la menor. Son los encantos de este deporte.
Con la derrota ante Colombia, Agricultores es el único conjunto con una sola victoria al término de cinco jornadas de competencia. Ganando los juegos ante Indios de Mayagüez y Federales de Chiriquí solo pueden esperar un poco probable empate múltiple (donde no esté Venezuela, por supuesto) en el cuarto escaño. Y ni eso les asegura nada.
Este lunes siguió el dale al que no te dio en el clásico regional (con Cuba fuera de ese jueguito). Ahora, Cañeros es el líder en absoluto con saldo de 4-1. Ese mismo equipo que nos ganó por 6-5.
Sus escoltas son Leones de Caracas, Tigres del Licey y Vaqueros de Montería, empatados con 3-2; pegados están Curazao, Indios de Mayagüez y Federales de Chiriquí (2-3), y después van los nuestros (1-4).
Todo apunta a que las dos últimas fechas de la ronda preliminar serán decisivas. Además del CUB-PUR, jugarán COL-RDO, MEX-PAN y VEN-CUR.
Si alguien pensó que el formato de ocho no iba a ser entretenido se equivocó, como mismo se equivocaron quienes decidieron que un campeón cubano con pocos refuerzos podría aspirar al oro en la Serie del Caribe.
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