Este verano va a ser muy deportivo. Terminando los Juegos Centroamericanos y del Caribe comienza la postemporada del béisbol cubano. Sin descanso, como en el relevo del batón. Serán unos playoffs muy interesantes, con novedades y expectativas.
Lo primero es que tendremos un nuevo campeón, después de dos años con la misma final y el mismo rey, Granma ni siquiera clasificó este año. Dicen que extrañan a don Carlos Martí. Yo también.
Además de Yasmani Tomás, hay varios cubanos residentes en el extranjero interesados en jugar sin repatriarse. Según fuentes de la Comisión Nacional de Béisbol es inminente el anuncio de quienes participarán en los playoffs. No debe pasar de miércoles o jueves.
Sobre los duelos, solo hay uno inédito: el Matanzas-Artemisa, por la sencilla razón de que los Cazadores nunca antes habían llegado a esa instancia del campeonato.
Los demás tienen su historia, hoy hablaremos de esos acumulados y próximamente abordaremos las herramientas y potencialidades de cada uno de cara a los cuartos de final.
Sancti Spíritus e Industriales se han enfrentado cinco veces en postemporada, cuatro en cuartos de final y una semifinal. Los Leones dominan en serie y en cantidad de juegos ganados.
Se impusieron en los cuartos de final de 2003-2004 y 2009-2010 y también en la semifinal de 2005-2006, y solo perdieron los cuartos de 2004-2005.
En total, los Azules han salido airosos en 15 de los 25 partidos efectuados en postemporada, según los archivos del estadístico Benigno Daquinta.
Hay un dato interesante en este pareo, Frederich Cepeda ha jugado en todos. No por gusto tiene varios liderazgos en playoffs.
El duelo entre Santiago de Cuba y Camagüey es otro que tiene vieja data con cinco enfrentamientos también. Incluso, desde mucho antes que las series fueran de eliminación directa.
Su primera vez fue en la campaña 27 (1987-1988) cuando se jugaba una postemporada de todos contra todos; entonces los orientales dominaron los dos partidos efectuados.
Después volvieron a chocar en par de cuartos de final y en la misma cantidad de semifinales, y siempre han ganado los santiagueros. ¿A la sexta irá la vencida?
En la instancia de los mejores cuatro de la temporada (1997-1998) se impusieron por 4-3 y por 4-2 en la de 2000-2001. En la ronda de ocho de 1999-2000 sacaron la serie por blanqueada de 3-0 y en la de 2006-2007 por 3-1.
O sea, cinco playoffs y 16 éxitos con seis derrotas. La historia pone a los indómitos en ventaja emocional.
Menos historia tiene el enfrentamiento entre Ciego de Ávila y Las Tunas. Se han visto las caras en dos ocasiones. En cuartos de final de la serie de 2011-2012, los Tigres ganaron por 4-3, y en la semifinal de 2018-2019 hubo desquite por 4-1.
Entre ellos hay más paridad: una serie para cada bando y ligera ventaja tunera en el balance de los partidos por 7-5.
Hasta aquí una aproximación histórica a los duelos que se avecinan. Aún los focos mediáticos están en San Salvador, pero poco a poco se trasladan hacia los estadios cubanos.
En una próxima entrega vamos con los datos individuales en postemporada: liderazgos, números redondos, posibles récords… Desde ya estamos en modo playoffs.
Disfrute el cierre de los centrocaribes, pero vaya calentando en brazo que se viene un verano de mucho béisbol a partir del próximo sábado.
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