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miércoles, 9 de octubre de 2024

A llenarnos de vida

Ha dedicado un sitio especial a sus libros, me ha pedido colocarlos en su mesita de noche, justo al alcance de su pequeño brazo...

Yaima Puig Meneses en Exclusivo 09/02/2018
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Marcelo-Feria del Libro
Marcelo amó comprar libros, aunque no supiera que era eso lo que hacía, supongo alguna nueva magia ha descubierto en ellos. (Yaima Puig Meneses / Cubahora)

Con la promesa de ir a descubrir el “castillo” del otro lado de la bahía nos fuimos este fin de semana a La Cabaña. “¡Habrá cañones y también muchos libros!”, le habíamos dicho antes a nuestro pequeño, pues siempre que es posible nos gusta anticiparle lo que encontrará en cualquier lugar que visite.

¿Cómo hablarle de feria si el significado de semejante palabra tal vez podría quedarle muy grande a sus casi tres años?

Y así decidimos irnos a la Feria del Libro en familia, a disfrutar de su magia a pesar del millón de gente, a contarle a Marcelo sobre faros, castillos, barcos y cañones, pero también a llenarnos de vida y permitirle elegir sus propios libros, porque no son los videojuegos los que mejor moldearán sus pensamientos y actitudes…

Marcelo amó comprar libros, aunque no supiera que era eso lo que hacía; amó escoger entre tantos los que prefería y, lo mejor, es que amó luego cada página… Nunca antes lo había visto tan maravillado con un texto —aunque mucho antes de nacer ya mamá y papá habían iniciado para él una colección de algunos preferidos—, y él nos pedía, casi nos exigía, que le “contáramos” el cuento escrito en esas nuevas páginas; para intentar luego él reproducir las historias tan solo observando las imágenes.

Y  recordé entonces un montón de años atrás —cuando la Feria del Libro no tenía ni la vibra ni el alcance de hoy—, en brazos de mi madre, rodeadas también de libros, de magníficos libros que todavía hoy me acompañan. Extraño era el mes en el que ella no gastaba los primeros “pesitos” de su salario en la pequeña librería ubicada en los bajos del cine Moncada, en mi natal Chaparra… y es que desde el principio de todos nuestros principios, era ese un placer en el que mami supo adentrarme con esmero.

Ahora Marcelo ha dedicado un sitio especial a sus libros, me ha pedido colocarlos en su mesita de noche, justo al alcance de su pequeño brazo… supongo que alguna nueva magia ha descubierto en ellos.

Y lo imagino entonces conquistando el mundo con sus grandes ideas y manitas de príncipe enano, con su amor e inteligencia… porque las buenas lecturas —hace muchos años aprendí— siempre salvan, y nos conducen por caminos extraordinarios que poco a poco van moldeando nuestro crecimiento.

Suerte la nuestra, de los cubanos, que la Feria del Libro se haya convertido no solo en un evento internacional, sino, fundamentalmente, en una gran fiesta para la lectura, la sabiduría, la convergencia de culturas diversas… que se ha extendido más allá de los muros de La Cabaña para envolver a toda Cuba en su manto de letras, en su manto de vida.


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Yaima Puig Meneses

Cubana. Periodista. Amante de escribir, porque las letras se me han convertido en una suerte de amuleto para el alma...

Se han publicado 1 comentarios


Iliana
 12/2/18 10:58

Yaima, qué lindo tu mensaje, Marcelo bello

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