El arte de las extensiones

De vuelta estamos, amiga y amigo, a nuestra habitual Parada con Estilo, un espacio que, aunque sencillo, se ha ganado el agrado de muchas personas y eso es genial. Un sitio diseñado para comentar e intercambiar sobre temáticas relacionadas con la belleza, la moda y los estilos.

Tengo una amiga, a quien le guardo un gran afecto, que se dedica al mundo de las extensiones en el cabello. Les confieso que a inicios de mi incursión en el mundo de los servicios de belleza no le veía nada atractivo a eso de hacer y colocar extensiones en el cabello, incluso, solía pensar que dicho servicio lo podría hacer cualquiera.

No se asombre, yo también he pecado muchas veces de ignorante, autosuficiente y necio. Muchas veces el desconocimiento de algo me ha hundido en una actitud de degradación hacia ese algo. Gracias a Dios uno va creciendo, madura y, si tiene suerte, gana en humildad y sencillez. Entonces, aprende que todo en absoluto merece respeto y admiración. Que aún el trabajo o la obra más simple, si la realizamos con amor y entrega, se convierte en una obra de arte.

Volviendo al tema,quiero comentar sobre las extensiones para de alguna forma compensar aquellos pensamientos que en algún momento surgieron y habitaron en mi mente. Por suerte hace ya bastante que disfruto y admiro absolutamente todo lo que una persona hace con entrega y maestría aunque pueda parecer simple a primera vista.

Amiga y amigo, nuestra calles, actividades festivas, aulas, centros de trabajos, barrios, etc. están adornado por el toque de las extensiones. Disímiles son los motivos por los que alguien decide colocarse extensiones así como disímiles los diseños y composiciones que podemos encontrar. Siendo así creo que, aunque no las usemos, las extensiones merecen que conozcamos un poco sobre ellas.

¿Para qué usar extensiones? La respuesta es tan variada como variada es la vida humana. Puede, incluso, que alguien decida usarlas total o parcialmente para “probar”, es decir, “para ver el toque que le dan a nuestra imagen”.

Puede darse el caso de que alguien desee dar un vuelco a su imagen y peinado, un vuelco radical, y para ello decida o necesite añadir longitud a su cabello. Aunque en ciertos casos hay que tener cuidado de no tener una fibra capilar demasiada corta porque los empalmes de sujeción de las extensiones se harán visible y esto rompe el encanto de la extensión además de resultar poco estético.

Junto al aspecto anterior se suman otros detallitos que pueden destruir no sólo la belleza de nuestro trabajo sino la salud de nuestro cabello y recuerde que en este espacio defendemos una belleza que no afecte la salud ni el bienestar. Por ejemplo, cuando el cuero cabelludo de la persona presenta un daño evidente entonces, mire, NO a las extensiones pues el cabello va a pesar más y por tanto tirará con mayor fuerza del cuero cabelludo.

Otro detalle es uno de los que más se observan, al menos en nuestro lindo país, hablo de un cabello muy dañado. Hablo de esos que, por decirlo de alguna forma, están en tan mal estado que parecen fibras de soga, áspera y reseca o, como dice un amigo peluquero, ha dejado de ser cabello para ser un estropajo. Decoloraciones, malos procedimientos, exceso de calor, agresión química y todo aquello que pueda hacer que el pelo se parta sólo de peinarlo. En esos casos, NO extensiones. Sería como ponerse una ropa hermosa encima de un cuerpo todo sucio.

Y que pasa cuando se lleva extensiones ¿Acaso también hay que cuidarlas como al cabello natural? Aquí tenemos otra de las aristas de las amadas extensiones, hay que cuidarlas y atenderlas. Recuerde, por favor, que estoy hablando de las personas preocupadas de si mismas porque, no es menos cierto que, hay quienes les da lo mismos "Juana que su hermana", es decir se enganchan las extensiones y se olvidan de ellas.

Las extensiones presentan una peculiaridad y es que su fibra tiende a enredarse mucho más que las del cabello natural. Ojo entonces con el lavado y el secado, no sea que la persona olvide que lleva extensiones y suceda que se quede sin alguna de ellas o haga todo un enredo capilar.Pero tampoco es que sean una odisea y mucho menos una tortura, en casa podemos cuidar bien de ellas si nuestros productos tienen algunas peculiaridades siendo una de ellas que estén libres de siliconas y parabenos.

Otro secreto es el cepillado, digo cepillado porque no es recomendable emplear ningún tipo de peine. El cepillado, no sólo para las extensiones sino para el cabello largo, es fantástico. En el caso de las extensiones debe ser con sumo cuidado y de abajo hacia arriba. Si se cuenta con cepillo de cerdas naturales sería lo ideal.

¡Ah!, un último punto. Las extensiones no están reservadas sólo para las mujeres, esas bellas flores que adornan nuestras vidas. Desde hace algún tiempo son cada vez más los hombres que se suman a la preocupación por su imagen y belleza, han comenzado a utilizar algunos servicios que antes eran sólo para chicas. No se asombre y si acaso se asombra entonces revise su mentalidad no sea que se haya quedado detenida en el tiempo.

Y ya se me escapa el tiempo que, como siempre, parece irse volando cuando uno está inmerso en algo de lo que uno disfruta. Espero que usted, al igual que yo, comience a partir de ahora curiosear sobre los cabellos de los demás para ver si descubre, implantados en ellos, a las maravillosas extensiones. Eso sí, que la curiosidad no le haga olvidar que cada semana tiene una cita con la belleza y el bienestar aquí en nuestra Parada con Estilo. Chao y suerte.